Como viene siendo habitual cada año desde hace tiempo, la vendimia se adelanta un poco debido a las altas temperaturas que hemos tenido este verano. Y es que la elevada temperatura, hace que la uva madure más rápido. En nuestra bodega, realizamos vendimia diurna y vendimia nocturna y en cada una de ellas vendimia manual y vendimia mecánica. ¿Conoces las diferencias de cada una de ellas? Te lo contamos.

Vendimia nocturna vs Vendimia diurna

Diferentes tipos de vendimia

Dependiendo del resultado que queramos obtener y por supuesto, de los recursos que tenga cada bodega, se va a elegir entre un tipo de vendimia u otro. Dependerá también de la variedad de uva que vayamos a recolectar si nos interesa mantenerla más fría o más cálida a su llegada a la bodega por ejemplo. 

Vendimia nocturna

Es curioso que cada vez más bodegas recurran al recurso de la vendimia nocturna. Una práctica que empezó siendo muy habitual en Rueda, se ha ido extendiendo por otras regiones por los beneficios que aporta al producto final.

Vendimiar de noche tiene sus dificultades, pero también sus ventajas. En zonas como la nuestra, los Montes de Toledo, podemos encontrar diferencias entre 10 y 12 grados entre la noche y el día. Recoger la uva de noche, va a hacer que la fruta esté más fría, concentrando su punto justo de hidratación en la recogida. Al llegar a los depósitos más fría, conseguimos que haya mayor control fermentativo, la maduración se ralentiza con una temperatura más baja y de esta forma la controlaremos a nuestro gusto. Finalmente el frío, va a aportar al producto final una reducción del volumen del alcohol, que sabemos que a una alta temperatura va a ser más elevado.

La vendimia nocturna hace el trabajo más difícil, pero también más fácil para los temporeros ya que trabajar con menos temperatura es más cómodo. Se hará normalmente con maquinaria, ya que recoger los racimos de noche manualmente es prácticamente imposible. Por ello, la selección de las uvas se realizará ya en bodega, cuando pasen por la turba y la despalilladora.

Vendimia diurna

Nuestra vendimia diurna es siempre manual. Se seleccionan los racimos y se separa la mejor uva para conseguir que el producto se elabore con los mejores frutos posibles. Normalmente recogeremos de día las uvas tintas, para los vinos de crianza, como es la tempranillo que está a estas alturas del año a punto de caramelo.

La vendimia manual es un proceso laborioso y requiere de mucho trabajo. Por una parte, tendremos el reloj sobre nuestras cabezas, ya que si hiciéramos vendimia mecánica, sabemos que es más rápida y que en el mismo día podemos terminar los campos. En cambio la vendimia manual es más lenta y puede tardar más de un día (y de dos) en hacerse. Las ventajas son que se elige la mejor uva, por ello nos aseguramos que el vino resultante va a ser de una calidad superior. Al tratar el fruto con delicadeza, vamos a evitar que se rompa y que empiece a fermentar antes de llegar a bodega, con lo cual controlamos el proceso de fermentación a nuestro gusto.

Vinos de alta calidad

Si algo caracteriza nuestra bodega es nuestro afán por hacer vinos de altísima calidad. Controlando la fermentación de la uva desde el primer momento y las temperaturas en la recogida, la selección de los racimos y el cuidado y el mimo de la vendimia, nos aseguramos que el producto sea el que queremos.

No nos engañemos, la vendimia es un proceso duro y pesado, que requiere mucho trabajo y esfuerzo. Pero también es un proceso hermoso, por el cual, esas viñas que hemos estado cuidando y trabajando durante todo el año, nos dan el fruto que deseamos para convertirlo en un manjar.

También a nivel cultural, más en una región como la nuestra, la vendimia es una fiesta para todos. Y, por si no lo sabías, es por este hecho que en la mayoría de los pueblos de España, las fiestas regionales se celebran entre agosto y septiembre. Antiguamente, lo que se celebraba era el inicio de la vendimia y que, en pocos días, los temporeros iban a descansar y festejar, bebiendo lo que llamaban el primer vino del año. Tras la vendimia, el primer vino joven puede estar hecho en dos o tres semanas. De ahí la tradición.

Por todo esto, llegados a estas fechas, todas las bodegas estamos preparando ya, si no algunas ya han empezado, con el maravilloso periodo de vendimia. El inicio de lo que serán las nuevas añadas de nuestros vinos y el comienzo de todo un proceso, laborioso y entregado, para ofreceros la mejor experiencia cuando descorchéis una botella.

Este año y como hemos comentado al principio, ya ha comenzado la vendimia en nuestros viñedos de los Montes de Toledo. Ya queda poco para disfrutar de las nuevas añadas.